Frustrado mitin en la Cumbre de Gobernadores

Eran las 8:00 de la mañana y con esto nos encontramos: dos estudiantes frente al Centro de Ferias, Exposiciones y Convenciones (CENFER) y un dispositivo preparado para la seguridad de ellos, los gobernadores, que no le temen a nada ni a nadie pero mandan a más de 100 militares a que los cuiden, andan con un montón de escoltas y en sus carros blindados. Teníamos preparada una manifestación pacífica para hacernos oír en medio de un evento nacional. No éramos muchos confirmados, sin embargo, los pocos que llegamos teníamos plena conciencia de la oportunidad que se nos presentaba de ser vistos y oídos, no nosotros sino nuestra exigencia, la exigencia de los EstudaintesUIS.

Nos esperaban, no precisamente un mitin pero si una marcha por ahí de 1000 estudiantes, dijo un compañero trabajador del evento. Ya éramos tres estudiantes a la entrada esperanzados en que llegaran muchos más con el pasar del tiempo. Empezamos a charlar un rato sobre lo veíamos a nuestro alrededor: francotiradores en lo alto de las montañas, tres patrullas ubicadas a pocos metros de la entrada principal de sur a norte y otras dos de norte a sur, cuatro carabineros y unos 20 policías a la entrada. Al fondo, en el camino que conduce al ingreso del evento, unos 30 efectivos entre policías y bachilleres. Según rumoraba un compañero adentro estaba lleno de francotiradores, SIJIN y DAS.

El reloj seguía corriendo, dos estudiantes más se acercaron y lamentaron que tan solo fuéramos cinco los que acudimos a la cita, nos sentamos en el borde del andén a especular sobre el día de regreso a la Universidad y las posibles soluciones al conflicto universitario por el que atravesamos. Seguíamos viendo entrar carros blindados al parecer de gobernadores, algunos carros de la ONU, buses y carros de personas invitadas al evento. Todos entraban porque tenían una escarapela que los acreditaba como asistentes al evento, al que llegaron por invitación, aunque supuestamente la Cumbre era abierta al público.

Cuando menos lo pensamos aparecieron ante nosotros 10 policías y 6 bachilleres acompañándoles junto a una patrulla. Inmediatamente nos dijeron que debíamos retirarnos del sitio, ¿qué era lo que hacíamos ahí? Nosotros claramente les dijimos que pensábamos entrar, pero ya sabíamos que no podíamos así que nos disponíamos a irnos en 10 minutos. Sin embargo, el Mayor de la Policía nos pidió los documentos de identificación para verificar antecedentes. Nosotros inmediatamente dijimos que no estábamos de acuerdo, sin embargo, dos compañeros entregaron el documento al instante, les dijimos que nosotros solo estábamos hablando y como ya le habíamos dicho: nos disponíamos a irnos. Aun así el policía insistió de manera mucho más autoritaria para que le entregáramos los documentos, nos negamos con el mismo argumento. En ese momento llegaron más bachilleres y el policía sacó una grabadora de voz para intimidarnos y hacernos sentir el Estado de Sito no declarado¹. Entonces entregamos los documentos, pero un compañero no tenía cédula, sino un comprobante entonces los policías procedieron a realizar lo que venían a hacer desde un principio llevarnos, y de la manera más arbitraria y salvaje lo metieron a la patrulla y como “supuestamente” no había sistema entonces tendríamos que acompañar a nuestro compañero.

Cinco estudiantes detenidos en una patrulla rumbo quien sabe a donde, supuestamente para verificar antecedentes. Sacados brutalmente del frente de CENFER por estar sentados hablando y ‘dañarles’ el cordón de seguridad.

Llegamos a CAI donde nos mantuvieron aproximadamente dos horas con el cuento de que no había sistema. Sepan ustedes, una Cumbre Nacional y la policía junto con la SIJIN no tiene sistema para proporcionar antecedes de inmediato. Ellos nos dijeron que no nos soltaban a hasta que no estuviésemos plenamente identificados pues temían que pasara algo en CENFER y nosotros fuéramos parte del plan, tal vez campaneros, un poquito más de paranoia. Seguidamente, quisieron amedrentarnos mucho más al decirnos que necesitaban todos nuestros datos personales, domicilio, teléfono y hasta el nombre de la pareja de un compañero con el pretexto de que si colaborábamos salíamos más rápido; a lo que nosotros respondimos No y que mejor nos dejaran salir de una vez pues nadie se había dado cuenta de nuestra detención y eso ya estábamos inquietos con tanta preguntadera.

Esta es la Seguridad Democrática: Estado de Sitio no declarado.

­­­­­­­­­­­­­­­­¹ Estado de Sitio